Me encantan las tortas de zanahoria, en especial cuando están húmedas y esponjosas… Y estos cupcakes ¡no son la excepción! ya que están igual o más ricos que las tortas hechas con ingredientes convencionales.
Siempre me ha gustado cómo combina el sabor de la avena con el de la zanahoria, así que en este postre usé harina de avena sin gluten. Si no tienes problemas con consumir gluten, puedes usar harina de avena convencional. Esta harina la puedes comprar lista o la puedes hacer tu mismo licuando las hojuelas de avena en un buen procesador hasta que tenga la textura de harina deseada. Además, hacerla en casa suele ser mucho más económico a que si la compramos en forma de harina.
Estos cupcakes no llevan huevo, son sin lácteos, sin azúcar, sin gluten.
Y por supuesto que ¡con muchísimo sabor! Son ideales para cuando tenemos antojo de comer algo que sea dulce y sabroso. Si además tenemos la posibilidad de compartirlos con familia y amigos, y pasar un buen rato con la mejor compañía, pues ¡mucho mejor! Además ¿quién se puede resistir a un placer dulce como este? ¡Yo no!
En el caso de no tener pasta de dátiles, lo primero que debemos hacer es prepararla. Para ello debes remojar 200 g de dátiles sin hueso en 200 ml de agua caliente durante 30 minutos. Pasado este tiempo, procesamos todo en una licuadora o procesadora hasta obtener una pasta sin grumos.
Enciende el horno a 165°C y coloca la rejilla en la posición media, con calor arriba y abajo. Prepara el molde para cupcakes colocando los papelitos en cada espacio (necesitarás aproximadamente 18 papelitos).
En un tazón grande tamiza la harina de avena, el polvo de hornear, la canela, el bicarbonato de sodio y la sal. Incorporar bien.
Agrega la pasta de dátiles, el aceite de coco, la leche de almendras, el jugo de lima y mezcla muy bien hasta incorporar todos los ingredientes. La mezcla debe tener una consistencia espesa y sin grumos.
Ahora añade la zanahoria, las nueces y mezcla bien.
Con ayuda de una cuchara, vierte suficiente cantidad de mezcla en los moldes, hasta que cubra casi todo el papel. Deberías poder cubrir aproximadamente 18 moldes.
Hornea durante 25 minutos o hasta que al introducir un palillo en el centro del ponquesito, éste salga limpio.
Ingredientes
Instrucciones
En el caso de no tener pasta de dátiles, lo primero que debemos hacer es prepararla. Para ello debes remojar 200 g de dátiles sin hueso en 200 ml de agua caliente durante 30 minutos. Pasado este tiempo, procesamos todo en una licuadora o procesadora hasta obtener una pasta sin grumos.
Enciende el horno a 165°C y coloca la rejilla en la posición media, con calor arriba y abajo. Prepara el molde para cupcakes colocando los papelitos en cada espacio (necesitarás aproximadamente 18 papelitos).
En un tazón grande tamiza la harina de avena, el polvo de hornear, la canela, el bicarbonato de sodio y la sal. Incorporar bien.
Agrega la pasta de dátiles, el aceite de coco, la leche de almendras, el jugo de lima y mezcla muy bien hasta incorporar todos los ingredientes. La mezcla debe tener una consistencia espesa y sin grumos.
Ahora añade la zanahoria, las nueces y mezcla bien.
Con ayuda de una cuchara, vierte suficiente cantidad de mezcla en los moldes, hasta que cubra casi todo el papel. Deberías poder cubrir aproximadamente 18 moldes.
Hornea durante 25 minutos o hasta que al introducir un palillo en el centro del ponquesito, éste salga limpio.
Lo mejor de estos cupcakes es que son muy suaves cuando están calientes. A mí ¡me encanta! comerlos recién salidos del horno acompañados de leche de almendras. A temperatura ambiente también están riquísimos, así que anímate a prepararlos y cuéntanos cómo te va. Recuerda que nos puedes etiquetar @nutririana y a mí @energicac para compartir tus resultados.
NOTA NUTRIRIANA: debido a su contenido de aceite de coco, esta es una receta con elevadas cantidades de grasa, especialmente saturadas. Se recomienda que su disfrute sea ocasional.
Divulgadora de estilo de vida saludable a través de mi marca Energicac y estudiante de repostería vegana. Informo y motivo a otros a incorporar alimentos a base de plantas en su día a día. A tener hábitos que les de energía y vitalidad, mantenerse activos y alcanzar lo que quieran lograr.